"Smoke"

"Smoke", película dirigida por Wayne Whang y escrita por Paul Auster, se ha convertido con el paso del tiempo en una película imprescindible para mí.

Es curioso como fué la primera vez que la ví; corría el año 1995 y yo no andaba muy sobrado de planes, así que cuando mi hermana me pidió que fuera con ella a ver una película de la que tenía que hacer un trabajo para la Universidad, no lo dudé. Y allí me encontré con "Smoke", no les voy a engañar, en aquel momento me pareció un coñazo totalmente infumable, nunca mejor dicho. Había cometido el error de haberla visto únicamente con los ojos, error de un joven inmaduro.

Transcurridos dos o tres años la estrenaron en el canal plus, mi agenda seguía bastante desocupada y decidí revisarla, de los ocho pases, me tragué cinco. Ni que decir tiene que después de esta ingesta, "Smoke" pasó a ser una de mis películas favoritas.

Han pasado diez años y en este difícil puente de la Constitución la he vuelto a ver, gracias al regalo de un gran amigo bloggero de éxito.

La película trata sobre las relaciones de cinco personajes: un estanquero que todos los días fotografía lo mismo llamado Auggie; Paul Benjamin, escritor yermo después de la pérdida de su mujer; Rashid, joven afroamericano con graves problemas de identidad; un mecánico con el brazo amputado llamado Cyrus y una tuerta mujer fatal que responde al nombre de Ruby.

El humo, los silencios y una serie de casualidades hacen que la vida de estas cinco personas se crucen y terminen cambiando las vidas de los otros.

No voy a desvelar la trama, sólo recordar algunos momentos inolvidables, como el relato del peso del humo de un cigarro, la historia del padre que era más joven que el hijo, el relato de Cyrus contándole a Rashid en qué circunstancia perdió el brazo izquierdo; o mi favorita: el cuento de Navidad que Auggie cuenta a Paul.

En definitiva, una película altamente recomendable con multitud de detalles que como dije antes es mejor no mirarla sólo con los ojos.